Los craqueladores sirven para imitar terrenos o superficies agrietadas en las que se han producido fracturas por las altas temperaturas y la falta de agua
El producto es muy sencillo de usar, simplemente tenemos que aplicarlo directamente del bote con una espátula, extenderlo y dejarlo secar 24 h. Es recomendable trabajar sobre superficies previamente imprimadas. Cuanto más gruesa sea la capa, mayor será el tamaño de las piezas de terreno que se generan, así como la separación entre ellas. Usándolo en pequeñas cantidades, también podemos simular este efecto en superficies pintadas expuestas a los elementos durante largos períodos, como en el caso de vehículos y otros objetos abandonados.
La variedad de colores hace que no sea necesario pintar la superficie. Sin embargo, si lo deseamos, una vez seco podemos usar sobre ellos cualquier tipo de pintura o producto de envejecido, ya sea acrílico, esmalte, laca, etc.